En Filipinas
llaman la atención las muchas parroquias de la llamada Iglesia Ni Cristo. El
nombre sorprende de entrada, porque parece decir que no las frecuenta ni dios.
Pero, no van por ahí los tiros. “Ni”, en tagalo, significa “de”, con lo que
tenemos que se trata de la
Iglesia de Cristo.
Esta original
iglesia la fundó en 1914 el filipino Félix Manalo, con la intención de
acercarla a la auténtica doctrina de Cristo. Le sucedió su hijo, Eraño Manalo,
y a éste su hijo, Eduardo Manalo. Como se ve, el negocio, que cuenta con más de cinco mil congregaciones, se
mantiene en familia.
La catedral de
Manila parece empequeñecer cuando contamos las muchas sedes de la Iglesia Ni Cristo que
hay en las Filipinas. Su influencia social, según dicen, es muy grande en las
islas.